No se si os pasa pero el "dormitorio de invitados" siempre suele terminar en "el cuarto donde va todo lo que no se donde poner", donde terminan aquellas mesillas que hemos cambiado, las sábanas que ya no nos gustan o esos cuadros que estamos hartos de ver. En el post de hoy traigo un poco de inspiración para hacer del cuarto de invitados un lugar donde apetezca estar ( sin arruinarse en el intento) y del que vuestros invitados no querrán irse. Ahi van algunas ideas:
1. Dale una nueva vida: Aprovecha lo que ya tienes; actualiza unas mesillas o una comoda vieja con una buena capa de pintura y cambia los tiradores. Verás el cambio que dan.
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2. Atrévete con el color: Hay colores que nos parecen arriesgados o con los que no nos atrevemos en el dormitorio porque pensamos que nos cansaremos de ellos. El dormitorio de invitados es perfecto para añadir color; al ser para estancias cortas no cansa y a demás le dará mucha alegria a la habitación.
3. Sácalo de contexto: ¿por qué no utilizar como mesilla un taburete, una silla o un baúl antiguo?
4. Reutiliza y decora: hemos visto miles de imágenes de cómo reutilizar palets, y de todas yo me quedo con usarlos de cabecero. Otras ideas? rescata unas puertas antiguas, un biombo o unas contraventanas. Apúntate al rústico-chic!
5. La importancia de los detalles: y por último pero no menos importante, cuidar los detalles. Unas flores frescas, velitas y unos libros harán que el espacio sea mucho más acogedor.
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